The Lanes, calles comerciales de Brighton
Brighton se considera la cuna del «movimiento mod» que se desarrolló en Reino Unido entre finales de los años 50 y mediados de los 60. La película Quadrophenia es un claro ejemplo de este movimiento y se rodó en esta ciudad costera y sus alrededores, como Seven Sisters.
Pero la mayor parte de los escenarios de esta película ocurren en lo que se denomina The Lanes, las estrechas callejuelas de la ciudad dedicadas sobre todo al comercio y al ocio.
Se conoce con este nombre, The Lanes, a dos conjuntos de calles laberínticas: the North Laines (las del norte) y the South Laines (las del sur). Las tiendas que nos encontramos en cada una de ellas son completamente distintas, al igual que su estética: las del norte son mucho más coloridas que las del sur, el aire de las del sur es más solemne que el de las del norte…
The South Laines son la parte más antigua de Brighton y son las que originalmente se conocían con el nombre de The Lanes. Recorrer estas calles nos dará la sensación de estar ante una antigua ciudad de pescadores (lo que fue en su día Brighthelmstone) llenas de cafés, grandes marcas de moda, joyerías independientes, sombrereras, tiendas de calzado artesanos, restaurantes y tiendas de antigüedades.
Por otro lado, en las del norte, situadas entre Queen’s Park Road y el Royal Pavilion, daremos con la parte más independiente y original de la ciudad. Sitios para comer y tiendas vintage y de segunda mano se mezclan con tiendas de discos , muebles latinoamericanos, cristalería sueca, joyas contemporáneas y grafitis.
Para apasionados de las gangas y liberíras de segunda mano, debemos acudir, entre The North Laines y Kemp Town, a un mercado techado que se celebra algunos domingos por las mañanas en el aparcamiento de la estación de trenes de la ciudad.
Brighton es una ciudad que se halla a menos de una hora en coche de Londres. Como ciudad costera, suele ser el verano la mejor época para viajar hasta ella. Aunque no queremos decir con esto que no se puede visitar en otro momento, todo lo contrario. Brighton seduce durante todo el año.
Foto vía: Beatriz Santos