Un día en las carreras de Ascot
Una de las carreras de caballos más famosas del mundo es esa donde las mujeres del público llevan sombreros de formas muy raras. Claro, me refiero a las carreras de Ascot, la carrera más popular del Reino Unido que está tan asociada a la familia real y que hemos visto infinidad de veces en revistas y películas.
Esta pista de carreras está situada en el pueblo de Ascot en Berkshire, a unas 6 millas del Castillo de Windsor, y ofrece 35 días de carrera durante todo el año en distintas categorías. La familia real suele estar presente en las que se corren en junio y julio estas son precisamente las que atraen mas gente curiosa y aficionados verdaderos.
La carrera de Ascot comenzó en 1711 con la reina Ana y la competencia de siete caballos, pero con el tiempo creció y cobró importancia y la reunión de la familia real en el evento se hizo popular en todo el mundo. Ascot permaneció unos cuantos meses cerrado al público por trabajos de remodelación en 2004 y en 2006 volvió a abrirse al público convertido en un sitio un poco distinto.
Es decir, además de las pistas de carrera y su aire aristocrático se construyó una nueva área de restaurantes y demás servicios y las principales quejas cayeron sobre ellos, ya que las críticas dicen que la vista desde las gradas hacia las pistas no son las que eran antes. Bien, que eso está en tren de solucionarse pero de todas formas pasear por Ascot es una muy buena opción turística.
Ascot organiza por año Días Familiares, 5 días dedicados a la familia y especialmente a los niños con muchos entretenimientos, conciertos en vivo, actividades de verano y una gran mercado navideño.
Hay autobuses frecuentes desde Londres, y puede llegarse en tren. La estación Ascot está a penas 7 minutos de la pista de carreras.
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